Hacía tanto que no tomaba una flor
en la mano
y olia su perfume,
hacía tanto que no cerraba
los ojos
y me abandonaba.
Hoy las estrellas lucieron
y los árboles reverdecieron
hoy las piedras me hablaron
y los guardias sonrieron;
Agosto se hizo primavera
Agosto se hizo luz
Agosto se hizo cuerpo
y habitó entre mis brazos.
Fui hombre de nuevo
de nuevo fui niño
y morí un poco más
viví de nuevo así.
Tu dedo en mi cara
se hizo Agosto.
Oh, sí, amantes,
acariciad su rostro
y dad gracias a la vida
por esos momentos
que nos mantendrán vivos
en las noches frias.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario