Te quiero (2024.10.17)

 Te quiero, susurro en la noche,

como una plegaria que me mantenga
cerca de mi humanidad.
Del que fui, de lo que viví.

Te quiero, mi amor, cariño, mi cielo.
Esas palabras que las madres
Pasado el tiempo,
Sólo le dicen a sus hijos.
Y que los padres ni dicen ni oyen.
Esas palabras que un día fueron mías.
Un paraiso perdido en el tiempo.

Resistir al tiempo
también es rezar esos verbos
el nectar que alimenta el corazón.

Dicen que reir es muy sano
Y que no hace falta tener un motivo para ello.

Decir te quiero es igual
Hay que decirlo
Aunque sea en susurros
Para sentir que estamos vivos.

(L.C.Crespo Aguirre, 2024.10.17)

Es verdad (23.09.2022)

Es verdad.
Cuando eres pequeño, 
el ruido de tus padres, 
trasteando por la casa,
es caliente como una manta.
Luego son tus pequeños los que producen ese calor.
Más tarde, cuando tus pequeños andan libres y lejos,
y tus mayores ya no están, 
algo queda que te calienta aún,
un rescoldo,
la conciencia de tus mayores,
el quizá de un más allá;
la esperanza
que nace de la insoportable idea del vacío.
Quizá no haya nada
y de qué me sirve creerlo...
En cambio esa remota lucecita
es como el faro en la oscuridad
en noche de tormenta.

A veces sueño (04.09.2022)

 A veces sueño

con una vida nueva,

Con unos brazos

que me abrazan,

recostados los dos

contra el atardecer.

Quizá leyendo,

quizá repasando el dia,

su pelo, su aroma...

Y pienso que, mientras,

quizá tú estés

sentada, sola,

mirando la televisión...

y se me hunde el sueño.

Escribo en esta ocasion (2016.05.28)

Escribo en esta ocasión
para hablar en vez de cantar
y es por ello que parece
que me pongo mas serio
como cuando de pequeño
escribia una redacción

es por ello que me apetece
deciros cosas que no me salen
que no me caben
cuando compongo canciones

me apetece deciros que 
a veces parezco tranquilo
que a veces parezco sensato
que a veces parezco sensible
pero que no siempre lo soy

que temo que penséis
que soy lo que no soy
y que cuando descubráis
que soy presa del pánico
que soy inconstante
que soy fatuo también
cambie el aprecio en desprecio

pues sabed que peco
pero intento enmendarme
que no soy guapo
ni soy feo
que depende del dia
y del angulo de luz

que al fin 
soy lo que doy
o quiero serlo
y si tengo malos pensamientos
por ello no me siento
pecador
sino humano
porque humano es desear
porque humano es soñar

otra cosa es arrebatar
robar lo de otros
o hacer llorar a los demás

y no, ahi no quiero estar yo

soy machista por dolor
soy humanista de profesión
grito a los cuatro vientos
lo que pienso
parq ue otros lo sepan
y me lo rebaten
porque si me quedo callado
es posible que nadie
venga a decirme
que estoy en lo cierto
o equivocado

hablo no por hablar
sino porque la verdad
vive en el aire
y no en los cajones
escondida

si la verdad no sirve para curar
no sirve para nada
no es un tesoro para guardarla
es un alimento para alimentarse de ella

Ese momento de mi vida (2015.04.25)

Estoy en ese momento de mi vida
en que ya no te preguntas nada
solo haces la cuenta atras
y decides vivir
como el pez que da
sus ultimas bocanadas
cada vez mas
todo da igual
lo importante es vivir
respirar
otra vez
otra vez
no hay bien ni mal
solo un reloj en marcha
cada uno lo ve como quiere
pero solo es un reloj
la arena cae
un grano
otro grano
otro
otro
...

A Pilar, tan persona (12.01.2014)

Esta gaviota se ha marchado a otros mares
a otras costas...
nos ha dejado el dibujo de su vuelo,
su especial giro,
su posado en tierra;
la curvatura de su pico,
su plumaje,
su mirada...
su sonrisa
la forma de quejarse en broma
de nuestras tonterías...
Vuela, gaviota; vuela y encuentra tu nido. Para siempre.
(A Pilar, tan persona, 12.01.2014)

Si no doy, no existo (2013/11/17)

Cada vez que hago llorar
siento que he fallado;
el que no se arriesga no se equivoca,
me digo a modo de consuelo;
pero mis ojos 
y mi boca 
prometen
sin prometer
y sin negar
defraudan las esperanzas
que nunca dieron.

Mis deseos son esperanzas
para otros
y cuando no los cumplo
traiciono sin querer.

Lo que doy es lo que al fin
importa.

Si no doy, no existo.

Los caminos se cruzan
piensas un hola
que luego no dices;
no existes.

Cada vez que fallo
me prometo no volver
a prometer sin promesas
a esperanzar sin esperanzas.

Los recuerdos de abrazos 
son lo único que me queda
migajas que para mi son tesoros
porque no tengo otra cosa
que llevar a mi corazón.

Me acuesto, me rebujo,
repaso mis abrazos
silencio.

Me levanto, me aseo,
el día promete
quizá no amor
quizá no pasión
pero al menos sí sonrisas
así que me voy a comprar el pan.

(L.C.Crespo, 2013/11/17)